Self Portrait with Monkey

1945

In this self-portrait, Frida again appears with one of her pet monkeys who lovingly clings to her as if to comfort her in her solitude. By using brownish tones in this portrait, Frida may be recalling the early sepia-toned photographs her father use to take. These brown-tones would appear in later painting such as "The Wounded Deer - 1946" and "Portrait of My Father - 1951". This self-portrait was painted during her most prolific period in which she created her best works, many of which were self-portraits.

Oil on masonite
22 ¼" x 16 ½"
Collection of
Robert Brady Fondation
Cuernavaca

Óleo sobre fibra dura
57 x 42 cm.
Colección de la
Fundación Robert Brady
Cuernavaca

En este autorretrato, Frida aparece de nuevo con una de sus mascotas, un monito, el cual la abraza cariñosamente, como para consolarla en su soledad. Frida usa colores marrones en este retrato y quizás está recordando las primeras fotografías que su padre tomó, las cuales eran en tonos sepia.
Estos tonos marrones aparecerían más tarde en otras obras como “El venadito herido” (1946) y “Retrato de mi padre” (1951). Este autorretrato fue pintado durante su etapa más prolífica en el cual creo sus mejores obras, muchas de las cuales eran autorretratos.