The Love Embrace of the Universe, the Earth (Mexico), Myself, Diego and Señor Xólotl1949 The subject of this painting contains many elements derived from ancient Mexican mythology. Frida's inability to bear children led her to adopt a maternal role towards Diego. In the center of the painting, like a Madonna, she holds her husband Diego in a love embrace that illustrates the combining relationship of women and men. Although the woman is the nurturing figure, the man has the third eye of wisdom in his forehead, so they are both dependent on each other. Embracing the human couple is the Aztec Earth Mother, Cihuacoatl, made from clay and rock. The outermost figure, the Universal Mother, embraces Cituacoatl. In the foreground, the Itzcuintli dog, Senor Xolotl, is more than simply one of the artist's favorite pets: it represents Xolotl, a being in the form of a dog who guards the underworld. In this painting, Frida presents life, death, night, day, moon, sun, man and woman all in a recurring dichotomy which is deeply intertwined and all is held together by two powerful mythological beings. In August of 1947, Frida drew a primitive sketch of this painting in her diary. Diary
Sketch |
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Oil
on canvas |
Autorretrato en la frontera entre el abrazo de amor de el universo, la tierra (México), yo, Diego y el Señor Xólotl1949 El tema de esta pintura contiene muchos elementos que se derivan de la antigua mitología Mexicana. La incapacidad de Frida para tener niños la empujó a adoptar un papel maternal en lo que respecta a Diego. En el centro de la pintura, como una Madonna, sostiene a su esposo Diego en un abrazo amoroso, que ilustra la relación combinada de hombres y mujeres. Aunque la mujer es la figura que alimenta la vida, el hombre tiene el tercer ojo de la sabiduría en su frente, por lo que dependen el uno del otro. Abrazando a la pareja humana esta la madre tierra Azteca, Cihuacoatl, hecha de barro y piedra. La figura que está en la parte más externa , la Madre Universal, abraza a Cituacoatl. En primer plano,el perro Itzcuintli Señor Xolotl es más que simplemente una de las mascotas favoritas de la artista: representa a Xolotl, un ser en la forma de un perro que guarda el mundo subterráneo. En esta pintura, Frida presenta a la vida, muerte, noche, día, luna, sol, hombre y mujer, todos en una dicotomía recurrente que está profundamente ligada y se mantiene unida gracias a dos poderosos seres mitológicos. En agosto de 1947, Frida dibujó un primitivo esbozo de este cuadro en su diario. |